¿Conocías la MENTA BLANCA y sus increíbles propiedades?
¿Conocías la MENTA BLANCA y sus increíbles propiedades?
La Menta Blanca es una planta medicinal que posee varias propiedades, de las que destacan las siguientes:
Acción digestiva.
Antiinflamatoria.
Expectorante.
Carminativa.
Antiespasmódica.
Aperitiva.
Antigripal.
Colerética.
Antiséptica.
Mucolítica.
Antirreumática.
Analgésica.
Antibacteriana.
Colagoga.
Antitusiva.
Antifúngica.
Descongestionante de las vías respiratorias.
La menta blanca posee una acción antiespasmódica y expectorante, la cual, ayuda a combatir las afecciones del sistema respiratorio como:
Asma.
Resfriado.
Tos.
Bronquitis.
Los vapores del mentol, sin duda, ayudan a aliviar la congestión nasal, del pecho y la sinusitis. La menta es un remedio para el resfriado común, sobre todo por su efecto descongestionante.
Es apropiada para náusea, mareo, fiebre, dolor de cabeza. Enfría el interior mientras favorece la transpiración y es apropiada para la digestión y para combatir las infecciones.
Con inhalaciones puedes despejar la congestión y otros problemas bronquiales que se asocian a los resfriados. El té de menta es apropiado para náusea, indigestión y gases.
En referencia al sistema digestivo, se recomienda como antiespasmódica en caso de digestiones flatulentas, dolores cólicos, espasmos o calambres en el estómago, ya que ejerce un efecto favorable sobre la secreción biliar (colagogo y coléretico) y estimula la secreción estomacal, lo que beneficia al hígado, al páncreas y a la vesícula bilar.
Como auxiliar digestivo, el mentol alivia el terso revestimiento muscular del tracto digestivo, inhibiendo las contracciones. Estudios alemanes y rusos prueban que la menta también puede ayudar a prevenir las úlceras estomacales y a estimular la secreción de bilis. Así, puede traer beneficios adicionales como ingrediente en los antiácidos.
Es antiséptica, antifúngica y antiviral debido a su contenido en aceite esencial y en polifenoles. Se utiliza en forma de gargarismos, inhalaciones o linimentos. Presenta además una notable actividad anestésica que potencia los anteriores efectos al disminuir la sensación de dolor, por lo que se ha utilizado en linimentos antirreumáticos y en forma de aplicaciones sobre dientes cariados y dolorosos. Por esta razón, es un ingrediente en muchas cremas que alivian el dolor.
Cura dolores de: cabeza, oídos, muelas, estómago, intestino, espalda y otros. Cuando se usa combinada con eucalipto (Eucaliptos globulus) aumenta su eficacia porque se sinergiza.
El mentol es considerado un “germicida activo”. Ya que, el aceite de menta en diversas pruebas de laboratorio, ha demostrado matar varias bacterias y el virus Herpes simples, que causa herpes labial y genital. Estos hallazgos dan credibilidad a los usos tradicionales de lamente en el tratamiento de heridas y bronquitis.
Finalmente, los antiespasmódicos de la menta blanca alivian no sólo el terso revestimiento del tracto digestivo, sino otros músculos suaves, como el útero. Varios herbarios recomiendan la menta como tratamiento para el mareo matutino. Además, se sugiere que concentrados medicinales de menta pueden inducir la menstruación.