PVO. TAPIRO Flor BSA. 60g
TAPIRO Flor, Polvo, Bolsa 60g
Código: 6761
Ingredientes:
Polvo de Tapiro
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Información de los principales ingredientes:
Nombre Científico: Sambucus mexicana
Partes utilizadas: la flor es la parte más utilizada; aunque también se puede emplear el fruto o las hojas.
Arbustos o árboles pequeños, si bien presenta también al menos dos especies herbáceas. Las hojas son pinnadas con 5-9 folíolos (raramente 3 u 11). Cada hoja tiene 5-30 cm de largo, y los folíolos tienen márgenes cerrados. Los grandes grupos de pequeñas flores de color blanco o crema se abren hacia finales de la primavera, y son seguidas por pequeños grupos de bayas de color negro, azul-negruzco o rojo (raramente de color amarillo o blanco).
Nativo de México y Centroamérica. Ampliamente cultivado en varias partes de Sudamérica y el Caribe hasta 3000 msnm. En Guatemala es cultivado como cerco vivo en casi todas las altitudes.
Las semillas contienen glucósidos cianogenéticos (generadores de cianuro) y en la corteza así como en las hojas y los frutos no maduros contiene el principio de la sambunigrina que, en contacto con una enzima, llamada emulsina, produce también ácido cianhídrico.
ATL03 Pp. 1279 Sambucus mexicana Presl
Existe muy poca información química sobre esta planta. Se señala que las frutas son ricas en taninos y que en las flores, raíces y frutos no cocinados se encuentra un glucósido cianogénico.
MEN03 Pp. 760 Sambucus mexicana Presl.
Aceite esencial rico en linalol, geraniol, neraol, flavonoides (rutina, isoquercitrina, hiperósido, camferol, astragalina), mucílagos, alcoholes, ácidos triterpénicos (α-amirina, betulina, ácido oleánico, β-sitosterol), taninos.
Las hojas contienen glucósidos cianogenéticos (sambunigrina), coniína y oxalatos. Las flores contienen glucósidos, colina, malato de calcio, ácido valeriánico, terpenos y aceite esencial. Las semillas contienen ácidos grasos, fitosteroles y taninos.
Contiene una gran cantidad de compuestos activos, aunque al parecer, el principal es una combinación de flavonoides, entre los que se cuentan la quercetina y la rutina, de propiedades antiinflamatorias y antivirales; contiene también: glucósidos, antocianidinas, ácidos málico, tánico y valeriánico; goma, sales minerales y materia colorante.
En el tratamiento de trastornos digestivos como bilis, corajes, diarrea, disentería roja (heces fecales con hilos de sangre, con dolor de estómago, asientos, escalofríos, hacen pura agua y hay cólicos), dolor de estómago, del hígado y estreñimiento. En problemas de piel como caspa, disípela, salpullido, caída del pelo, sarampión, sarna, sabañones, quemaduras, edema y vergüenza (enrojecimiento, hinchazón y pequeños granos rojos en la cara).
El Tapiro es también recomendado como purgante, desinfectante y diurético y utilizado para combatir la caries, conjuntivitis e infección en ojos y oídos, contra los parásitos y la rabia. Para el corazón, dolores musculares, heridas, heridas pasmadas, llagas, quebraduras, reumas, calambres, expulsión de placenta, menorrea, hemorroides, purificación de la sangre, calor en la cara, enfriamiento, y alcoholismo.
Por vía externa, las flores aplicadas en cataplasmas o su decocción son resolutivas y desinflamantes.
El dulce preparado con los frutos de este árbol es un depurativo de la sangre.
Principal acción: sudorífico, quita manchas, antihemorroidal, antiviral y antiinflamatorio.
Principal aplicación: contra el sarampión, tos, problemas oculares, hidropesía, resfriados, alivia hemorroides y desaparece manchas epidérmicas.
El tapiro es antiinflamatorio, antiviral, depurativo, descongestionante, diaforético (sudorífico), y expectorante. Estimula y fortalece el sistema inmunológico y ayuda a curar enfermedades de las vías respiratorias y de las fiebres.
El tapiro es una medicina útil para curar enfermedades de las vías respiratorias, como: el resfrío, la gripe, la sinusitis, la tos, la tosferina, la bronquitis y la pulmonía; desinflama y descongestiona la garganta, la laringe y las fosas nasales. El tapiro, como la equinácea, fortalece el sistema inmunológico debido a que sus antocianidas estimulan la producción de linfocitos (glóbulos blancos o leucocitos), células que cumplen una función defensiva en el cuerpo contra los microorganismos infecciosos.
El tapiro, como diaforético, estimula la sudoración profusa del cuerpo logrando con ello bajar fiebres o suprimirlas, incluyendo las causadas por enfermedades infecciosas eruptivas, como el sarampión, la varicela y la escarlatina. También se ha probado la utilidad de esta planta en el tratamiento de las fiebres palúdicas intermitentes.
Opinión de expertos:
Rodrigo Mondragón afirma su uso para tratar la calentura y la tos, ésta última descrita como una afección pulmonar, que puede dar a consecuencia del catarro de frío, y provoca una tos seca y constante con dificultad para respirar y resequedad de garganta. Además, se utiliza en diversas enfermedades respiratorias como la bronquitis.
El tapiro también se recomienda en el tratamiento de trastornos digestivos como bilis, corajes, diarrea, disentería roja (heces fecales con hilos de sangre, con dolor de estómago, asientos, escalofríos, hacen pura agua y hay cólicos), dolor de estómago, del hígado y estreñimiento.
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Hoja de datos
Estado físico: | Polvo |
Contenido neto: | Bolsa 60g |
Vía de uso o administración: | Administración oral |
Instrucciones para su uso o consumo: | Como lo indique su asesor herbolario. |
Instrucciones para su preparación: | Como lo indique su asesor herbolario. |
Instrucciones para su conservación: | Guárdese en un lugar fresco y seco. |
Necesidades de refrigeración: | No es necesario. |
Precauciones: | Mujeres embarazadas o lactando, deberían consultar un médico antes de usar cualquier producto. No se use si es intolerante o sensible a los ingredientes. No se deje al alcance de los niños. |
Dimensiones del paquete: | 0.00cm x 0.00cm x 0.00cm 0.00 kg |
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