Información de los principales ingredientes:

Nombre Científico: Calendula officinalis

Con la mercadela se ha demostrado experimentalmente que las flores presentan actividad antibiótica contra bacterias, hongos y virus patógenos característicos en infecciones respiratorias y de la piel. Ejercen una acción antiinflamatoria, emenagoga, sudorífica, antiespasmódica, espasmolítica, estimulante, colerética, colagoga, hipotensora, vasodilatadora, antiséptica, vulneraria, cicatrizante, antiprotozóica, febrífuga, carminativa, amarga, tónica, sudorífica, antiemética, antihelmíntica, antiséptica, astringente, diaforética, estimulante biliar, antihemorrágica, colerética, tranquilizante, y disminuye la excitación.

Se recomienda en casos de hidropesía, hematuria o sangre en la orina, diarreas, sarampión y escarlatina, VIH, cáncer, conjuntivitis, fiebre, gripe, enfermedad de Hodgkin, úlceras internas, vómitos, dolor muscular, esguinces, gastritis, afecciones respiratorias, artritis, ictericia, menopausia, úlcera gástrica y duodenal, colecistitis, colangitis, cistitis, dismenorrea, afecciones respiratorias, amenorrea, espasmos del tubo digestivo, angiocolitis crónicas, insuficiencia hepática, anginas o amigdalitis, paperas, tos, tosferina, garganta seca y migrañas.

Se le otorga también una acción como reguladora de los períodos menstruales, acortando las prolongadas y facilitando las breves, y como calmante de los dolores propios.

Es colerético estimulando la actividad hepática, especialmente la secreción biliar, la hepatitis infecciosa y es remedio extraordinario para la ictericia y demás enfermedades del hígado.

Por su acción antiulcerosa, ayuda a la cicatrización de úlceras gástricas.

Es sudorífica y un excelente tónico para la anemia ya que aumenta los glóbulos rojos.

Tomada dos veces al día depura la sangre y activa la circulación sanguínea, alivia el dolor de estómago y cura la tos, la tosferina y la ronquera.

Por lo demás es bueno recordar que algunos autores recomiendan la infusión de caléndula como buen remedio contra el cáncer en los casos que no se pueden operar, tomándola por tiempo indefinido.

Se recomienda en caso de alteraciones inflamatorias de las mucosas bucofaríngies y heridas, incluso las de difícil cicatrización como ulcus curia.

El cocimiento de las hojas y flores de esta planta se usa en baños y lavados como remedio para las almorranas, enfermedades infecciosas de la piel, y micosis (enfermedades causadas por hongos) de los pies, vagina y cuero cabelludo.

Aplicada en fricciones es efectiva contra el reumatismo y los dolores musculares.

La caléndula es beneficiosa en el tratamiento de la dermatitis del pañal de los bebés, y los pezones agrietados en madres lactantes.

Debido a la presencia de carotenoides en su composición química, tiene grandes propiedades reepitelizantes, lo que la hace ideal para la curación en general, la cicatrización de heridas, eczemas, así como la lucha contra los signos de envejecimiento.

Muchos especialistas recomiendan gargarizar con una infusión de caléndula para luchar contra los gérmenes y la inflamación asociada a las heridas dolorosas en la boca.

No debe usarse si hay hipersensibilidad o alergia a la mercadela o flores similares.

No se debe tomar durante el embarazo y la lactancia porque se desconocen sus efectos.

No se han descrito interacciones con otros medicamentos, aunque debido a la presencia de mucílagos pudiera existir riesgo potencial de retrasar o disminuir la absorción oral de otros principios activos.

Opinión de expertos:

Rodrigo Mondragón afirma que la flor contiene aceite esencial en el se ha identificado los monoterpenos carvona y geranil-acetona, y los sesquiterpenos dihidro- actinodiólido, epóxido de trans-cariófileno, α- y β-ionona. Otros componentes de la flor son los flavonoides narcissín, isoquercetín y sus glicósidos ramnosil-rutinósido, D-glucósido y neohesperidósido; las cumarinas esculetín, y umbeliferona; los triterpenos α- y β-amirín y sus ésteres, arnidenediol breín. En la hoja se han detectado el componente quinoide ubiquinona, y en la raíz los calendulósidos B, F, G y H, inulina y varios glicósidos del ácido oleanóico.

Tiene propiedades sudoríficas, estimulantes, antiespasmódicas, coleréticas, colagogas e hipotensoras, además de ser un nutriente para la vista pues contiene luteína y vitaminas A y E. Es antibacterial; en gripes e infecciones es útil, asimismo para combatir afecciones de la piel, es auxiliar en heridas en la boca, permite aliviar las marcas de golpes, es auxiliar en heridas en la boca, permite que cicatrice la cesárea rápidamente (también se puede aplicar aceite de mercadela).

En caso de quemaduras de primero y segundo grados es de gran utilidad. También para pies sudorosos que se despellejan, se pueden practicar pediluvios. Proporciona flexibilidad a los músculos, combate parásitos y el Staphylococcus aureos que afectan a la garganta (tomando y en gargarismos).