Información de los principales ingredientes:

Nombre Científico: Citrus sinensis

La flor de Azahares es conocida mundialmente por sus propiedades hipnóticas y ansiolíticas. Esto la convierte en el complemento ideal para combatir los síntomas asociados a los nervios y la ansiedad como las náuseas y el vómito.

Por su alto contenido de pectina, es utilizada para contrarrestar las diarreas profusas en adultos jóvenes y mayores.

La flor de Azahares también sirve como complemento natural para nivelar el colesterol, aunado a una dieta apropiada para tal fin. También tiene efectos sedantes, por lo que se utiliza para combatir los cólicos menstruales y el insomnio.

Ayuda también a aliviar el dolor de cabeza y otras molestias menores.

Una de las bondades más llamativas de la flor de azahar es su capacidad de proporcionar a la piel una suavidad y brillo sin igual, pues estimula la producción de colágeno. Del mismo modo, la piel puede beneficiarse de la flor de Azahares pulverizada cuando se tiene la piel quemada por el sol. Su efecto leve ayudará a calmar la quemadura y reducir el enrojecimiento en la piel.

Asimismo, por sus componentes sedantes, la flor de Azahares brinda apoyo a las madres que deben lidiar con la hiperactividad de sus menores hijos. Por otro lado, la flor de Azahares es rica en hierro y potasio. Esto la convierte en una buena aliada si se tienen problemas de anemia y desmayos frecuentes. Además, otro de sus componentes más preciados es la vitamina C, por lo que revierte los efectos de la gripa.

De la misma manera, sus propiedades hipnóticas y ansiolíticas también son muy conocidas. Gracias a ellas, la flor de Azahares es ideal para combatir problemas de ansiedad y nervios, así como indigestiones leves, por lo que permite reducir el dolor estomacal.

Aplicada sobre la piel en forma de cataplasmas preparadas con el polvo de la flor de Azahares es utilizada para calmar dolores reumáticos, calambres y los malestares ocasionados por las várices, esto a nivel externo, por lo que es de gran ayuda para aliviar el cansancio y dolor en las piernas y pies.

Asimismo, alivia el dolor de garganta e irritación.

Es importante resaltar que las mujeres embarazadas, menores de seis años y personas con gastritis o enfermedades neurológicas como Parkinson no deben ningún tipo de compuestos elaborados con esta planta bajo ninguna circunstancia.

Opinión de expertos:

Rodrigo Mondragón afirma que es muy recomendable en los desmayos y desvanecimientos, sobre todo de la mujer.

Por otro lado, el aceite de azahar figura en primer plano como sedativo- antidepresivo; puede emplearse contra el insomnio, la histeria, la ansiedad y la depresión. Apacigua la mente, retardando su actividad.

Ejerce también un notable influjo en el corazón al reducir la amplitud de las contracciones del miocardio; de ahí su uso en el tratamiento de las palpitaciones y otras modalidades de espasmo cardíaco.

Esto lo hace asimismo eficaz en estados de pánico, histeria y excitabilidad aguda, como se ve en algunos individuos que se alteran sin motivo justificado o pierden los estribos por una nimiedad. No cabe duda que el azahar es un valioso remedio para el shock, el miedo repentino y todo cuanto entraña un esfuerzo brusco y suplementario para el corazón.

El azahar es también sedante. Se usa básicamente por sus beneficios en el tratamiento de algunas afecciones de las vías respiratorias, como la tos nerviosa, la tosferina y la bronquitis; en el dolor de oído y de algunos cólicos, y contra el hipo.

De manera común se utilizan en casos de insomnio, tanto de niños como de adultos, gases intestinales, espasmos digestivos -es un excelente remedio para el cólico infantil-, nerviosismo y palpitaciones.

También está indicada en el síndrome del “colon irritable”, que produce dolor y trastornos del tránsito intestinal.

Los azahares son un remedio para las personas con la presión arterial baja.