Información de los principales ingredientes:

La Glucosamina es una sustancia natural muy utilizada para prevenir y acelerar la recuperación de lesiones en las articulaciones.

Se ha comprobado que la glucosamina tiene propiedades antiinflamatorias. Su mecanismo de acción parece ser diferente al de anti-inflamatorios no esteroideos por lo que podrían actuar de forma sinérgica. Ensayos clínicos han evidenciado que la suplementación con glucosamina permite reducir la dosis de antiinflamatorios consiguiendo los mismos efectos de reducción de la inflamación.

La glucosamina pueden frenar la degradación de colágeno ayudando a prevenir lesiones en las articulaciones y frenando, así mismo, la progresión de la artritis y artrosis. Estimula y es necesaria para la producción de líquido sinovial, líquido que lubrica y amortigua las articulaciones.

Se ha demostrado que consigue disminuir los síntomas como rigidez y dolor aumentando la movilidad de las articulaciones afectadas. Contribuye a la creación de líquido sinovial, el fluido viscoso que acolcha y lubrica las articulaciones, evitando su fricción.

La gran ventaja de la glucosamina es que no solo puede producir una disminución en el dolor del paciente de osteoartritis, sino que puede frenar el desgaste articular siendo la materia prima para la regeneración del mismo.

Evita la destrucción del tejido cartilaginoso, calma la hinchazón, las molestias en las articulaciones y la falta de movilidad que se produce a causa del desgaste y el mismo dolor generado.

Opinión de expertos:

Rodrigo Mondragón afirma que está involucrada en la formación de uñas, tendones, piel, ojos, huesos, ligamentos, cartílagos y válvulas del corazón. Es una sustancia que se produce de manera natural en nuestro cuerpo pero con el paso de los años, al igual que muchas funciones orgánicas, disminuye provocando que se presenten de ciencias en el funcionamiento de nuestro cuerpo, sobre todo a nivel articular.

Diferentes estudios han demostrado que el tratamiento oral con glucosamina produce grandes mejorías en los síntomas de dolor, movilidad e in amación con respecto a personas que no lo han ingerido por lo que es una excelente opción para el tratamiento básico de pacientes con osteoartritis. La glucosamina es sin duda un tratamiento recomendable para combatir la causa fundamental del proceso degenerativo osteoarticular.

Actualmente la glucosamina es la suplementación más utilizada para la artrosis y los dolores en las articulaciones. Puede esperarse un alivio al dolor entre dos y cuatro semanas, dependiendo del grado de avance de la enfermedad, la dieta y la disposición genética, entre otros factores. Se recomienda tomar glucosamina por lo menos 3 meses antes de tener exámenes reales de sus beneficios y su consumo se debe prolongar al menos durante seis meses.