Ingredientes:
ACEITE DE HIPERICÓN (Hipericum officinale)


“El hipericón: descubre sus maravillosas propiedades para tu bienestar"

El hipericón es una planta extraordinaria que encierra un sinfín de beneficios y propiedades magníficas. Conocido por su efecto antidepresivo natural, este poderoso remedio ha despertado el interés de la comunidad científica como un posible tratamiento contra el cáncer, especialmente en el glioma cerebral.

Pero sus aplicaciones no se detienen allí, ya que el hipericón tiene múltiples usos y beneficios para tu salud y bienestar.

Tradicionalmente recomendado en casos de depresión leve, tristeza y astenia estacional, el hipericón es un aliado para mejorar tu estado de ánimo y aumentar tu bienestar físico. Su consumo ha demostrado reducir la ansiedad y la agresividad, aliviando los síntomas de la depresión y brindando una sensación general de bienestar.

Además de sus efectos psicológicos, el aceite de hipericón posee excelentes propiedades analgésicas, lo que lo convierte en una opción eficaz para tratar dolores leves o moderados, como los dolores menstruales, musculares o articulares.

Si padeces dolores articulares, ciática, contracturas o espasmos, el hipericón puede brindarte alivio y mejorar tu calidad de vida.

Pero sus beneficios no se limitan solo al ámbito físico, ¡también es un aliado para tu piel y cabello! El hipericón ayuda a eliminar manchas en la piel, incluyendo las causadas por la psoriasis. Además, mejora la hidratación de tu cabello y piel, estimulando la regeneración celular y previniendo el envejecimiento prematuro.

No solo eso, el hipericón también ha demostrado tener propiedades calmantes y vasodilatadoras, lo que lo convierte en un tratamiento eficaz para varices y hemorroides. Su aceite posee propiedades antisépticas y cicatrizantes debido a su alto contenido en taninos, por lo que se utiliza con éxito en heridas, acné, quemaduras y otras afecciones cutáneas.

¡Descubre los múltiples beneficios del hipericón y mejora tu bienestar de manera natural!

Información de los principales ingredientes:

Nombre científico: Hipericum officinale

El hipericón es una sencilla pero maravillosa planta que esconde infinidad de usos y magníficas propiedades. Bastante conocida como antidepresivo natural, y actualmente estudiada, entre otras cosas, como posible tratamiento contra el cáncer, especialmente del glioma cerebral.

Se aplica a fin de minimizar las consecuencias de los golpes, pero es también muy útil en otras circunstancias.

Es tradicionalmente recomendado en casos de depresión leve, tristeza y astenia otoñal o primaveral. En el caso de su uso como antidepresivo, el hipericón produce una disminución de la ansiedad y la agresividad, ayuda a mejorar los síntomas de la depresión e incrementa el bienestar físico.

Además de sus efectos psicológicos, el aceite de hipericón tiene muy buenas cualidades analgésicas, por lo que se suele administrar también para tratar dolores leves o moderados como los dolores menstruales o dolores musculares o articulares.

Puede ayudar en los dolores articulares, de ciática, musculares, contracturas y espasmos.

Elimina las manchas de la piel -incluso las de psoriasis-, mejora la hidratación del cabello y la piel, estimula la regeneración celular evitando el envejecimiento y en algunos sitios de utiliza para la gastritis y las úlceras estomacales.

También tiene buenas propiedades calmantes u vasodilatadoras, por lo que se suele utilizar para tratar varices o hemorroides. El aceite es además es antiséptico y cicatrizante por su alto contenido en taninos, por lo que se suele utilizar por vía externa para tratar heridas, acné, quemaduras y otras afecciones de la piel.

Opinión de expertos:

Rodrigo Mondragón asegura que el aceite de hipérico está indicado por su acción antivírica, antibacteriana y antiinflamatoria. También es usado en estados de ansiedad, nerviosismo, insomnio e irritabilidad y en las migrañas. Es bueno para las gastritis o las diarreas.

Se toma de manera general en forma de cápsulas y sus resultados positivos están ampliamente contrastados en depresiones suaves y moderadas, sus efectos más acusados se observan a las dos o tres semanas de tratamiento y puede llegar a sustituir a los fármacos de origen químico. También puede ser útil en formas más graves de depresión, pero sobre esto último no hay experiencias suficientemente contrastadas desde el punto de vista científico.

En uso externo se usa en forma de cataplasma, compresas se empapan en aceite.

El aceite también se usa para picaduras, cardenales, quemaduras del sol, úlceras dolorosas y que no cicatrizan, urticaria, heridas, llagas, grietas mamarias, eccemas. Los resultados de la aplicación del aceite son siempre sorprendentes por sus resultados, conocemos casos de cicatrización de heridas de personas diabéticas. Recordar que es un buen antiinflamatorio.