Ingredientes:
Polen de flores


“¡No esperes más para incorporar el polen a tu alimentación diaria!”

El polen es más que solo un conjunto de granos minúsculos producidos por las plantas con semillas. Es la clave para la vida en nuestro planeta, ya que sin él no habría ni semillas ni plantas ni árboles que dieran frutos. Además, es una fuente rica en nutrientes que aporta beneficios para la salud humana.

El polen contiene una gran cantidad de vitaminas, proteínas, minerales y enzimas, y su composición varía según las especies de plantas recolectadas por las abejas. Pero lo más impresionante es que cada grano de polen es un concentrado de sustancias nutritivas con enormes propiedades curativas gracias a sus componentes.

Los expertos en nutrición no dudan en destacar los beneficios del polen para la salud. Contiene más vitamina B1 que el extracto de levadura o el germen de trigo, más vitamina B2 que los huevos y la leche, y algunos tipos de polen tienen más contenido que la levadura de cerveza o la carne de ternera. También es rico en vitamina C, vitamina E y magnesio, calcio y otros minerales esenciales.

El polen es uno de los complementos alimenticios de más rápido efecto sobre el organismo humano. Los consumidores regulares lo describen como extraordinario debido a su intensa acción estimulante, que proporciona una gran energía y vitalidad. Además, contiene todos los aminoácidos esenciales para el organismo, incluso aquellos no sintetizables por el organismo y que habitualmente sólo se encuentran en alimentos de origen animal.

En definitiva, el polen es un alimento altamente nutritivo y beneficioso para la salud que no debería faltar en nuestra dieta diaria. Sus propiedades vigorizantes y curativas son innegables, por lo que su consumo regular podría marcar una gran diferencia en nuestra calidad de vida.

Información de los principales ingredientes:

Polen es el nombre colectivo de las microsporas (granos de polen) producido por los órganos masculinos de las plantas con semilla. Sin polen no habría semilla que prosperara convirtiéndose en planta, ni planta que no pereciese, ni árbol que diese fruto y por tanto tampoco habría vida animal, que normalmente se sustenta en la vegetal.

Como otros muchos alimentos, el polen contiene agua, aminoácidos, proteínas, lípidos, carbohidratos, minerales, vitaminas, enzimas y otros micronutrientes. La composición del polen varía según las especies de plantas recolectadas por las abejas. En cualquier caso, destaca su alto contenido en proteínas, vitaminas y hormonas que favorecen el crecimiento.

Cada grano de polen es un complejo concentrado de sustancias nutritivas con enormes propiedades curativas gracias a sus componentes. Los componentes e cientes del polen, es decir, los que determinan su actividad biológica (de gran interés en medicina) son ácidos nucléicos, vitaminas A, C, E y B, magnesio, calcio, enzimas y sustancias bio-activas. El polen una vez recolectado es deshidratado para su distribución y evitar que enmohezca y fermente.

Opinión de expertos:

Rodrigo Mondragón afirma que el polen tiene tanta o más vitamina B1 (tiamina) que el extracto de levadura o el germen de trigo; tiene más vitamina B2 (ribo avina) que los huevos y la leche, y algunos tipos de polen tienen más contenido que la levadura de cerveza (muy rica en esta vitamina) o la carne de ternera; su contenido en vitamina C es similar a las espinacas, el jitomate o los plátanos; y en algunos tipos de polen el contenido en vitamina E es similar al del germen de trigo, los cacahuates o el aceite de oliva.

A su vez el polen reúne todos los aminoácidos esenciales para el organismo, incluso aquellos no sintetizables por el organismo y que habitualmente sólo se encuentran en alimentos de origen animal.

El polen se considera uno de los complementos alimenticios de más rápido efecto sobre el organismo humano, cuyas propiedades vigorizantes se deben a una intensa acción estimulante, que los consumidores regulares no dudan en definir como extraordinaria.