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La tos es un reflejo vital del organismo, generalmente causado por la presencia de algún cuerpo extraño en las vías respiratorias o inhalación de sustancias tóxicas. La tos seca, con flema y la tos alérgica pueden ser uno de los síntomas relacionados con la gripe, resfriado, neumonía, crisis de bronquitis, tos ferina y muchas otras enfermedades.

Algunas situaciones que favorecen a que surja o persista la tos pueden ser: gripe o resfriado; sinusitis; rinitis, laringitis o faringitis; bronquitis aguda; crisis de asma; bronquiectasia; exposición a las sustancias que causan alergia como polen o ácaros; efecto secundario de medicamentos para el corazón; neumonía; enfisema pulmonar y edema o embolia pulmonar.

La tos alérgica se caracteriza por una tos seca persistente que ocurre siempre que el individuo es expuesto a aquello que le produce alergia, que puede ser los pelos de gato o de perro, polvo o al polen de las flores o a determinadas plantas, por ejemplo.

La tos seca puede ser causada por una irritación en la garganta causada por la inhalación de humo, cigarro o la presencia de un objeto extraño en las vías aérea, por ejemplo, y descubrir la causa es fundamental para que el tratamiento sea exitoso.

Las enfermedades del corazón pueden causar tos seca persistente, sin ningún tipo de secreción involucrada. La tos puede surgir en cualquier momento y puede empeorar por la noche cuando la persona está acostada. Se sospecha de que existe algún compromiso cardiaco cuando ningún medicamento puede cesar la tos, incluso los que se utilizan en caso de asma o bronquitis.

La tos con flema puede ser causada por enfermedades respiratorias como gripe, resfriado o infecciones respiratorias, por ejemplo. En este caso suele estar acompañada de otros síntomas como dolor en el cuerpo y, a veces, fiebre.

La tos es fuerte y la flema puede ser espesa, pero en poca cantidad, y puede tardar más de 3 meses en curarse. Es más frecuente durante la infancia pero también puede a cualquier edad.

La neumonía se caracteriza por la presencia de tos con flema y fiebre alta, que generalmente surgen después de la gripe. Otros síntomas que pueden estar presentes son dolor en el pecho y dificultad para respirar. La persona puede sentir que por más que inspire el aire parece no llegar a los pulmones.

El “ORÉGANO” (Origanum vulgare) ha sido ampliamente estudiado, uno de sus principales beneficios es el actuar como un importante antioxidante, también posee características antimicrobianas.

Uno de los principales usos que se da al orégano es principalmente como condimento, pero esa característica antiséptica es bien conocida entre las culturas populares, pues cuando se tiene molestias de garganta o tos, es uno de los mejores remedios para esta última, mucho más efectivo y económico que muchos jarabes farmacéuticos y completamente natural.

Es un remedio natural para la bronquitis, bronconeumonías, asma, y otras afecciones del sistema respiratorio superior ya que actúa como antiespasmódico, expectorante y antiasmático.
(Fuente: http://www.lashierbasmedicinales.com/oregano-un-de-los-remedios-para-la-tos/)