La Nuez de Castilla más que un ingrediente

Por sus propiedades antimicóticas, bactericidas y vermífugas la decocción de las hojas también se recomienda en gargarismos (aftas, amigdalitis) y duchas vaginales (flujos, leucorrea); popularmente, además, se emplea en el control de la diabetes; este mismo preparado se aplica sobre el cuero cabelludo para evitar la caída del pelo.

Propiedades antisépticas, cicatrizantes, tonificantes, vermífugas e hipoglucemiantes. Baja el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Se considera que posee antioxidantes. Se le asocia con la prevención del cáncer y de otras enfermedades que tienen que ver con los radicales libres. Se le usa para enriquecer la sangre y combatir el envejecimiento prematuro.

Está indicado en úlceras de la piel y cuero cabelludo, sabañones, inflamaciones e infecciones vaginales, y muy eficaz para la eliminación de lombrices. En la diabetes se aplica para aminorar la cantidad de glucosa en la sangre.

La infusión se empleaba tradicionalmente para oscurecer el pelo. Es astringente, expulsa las lombrices intestinales, antiespasmódica, digestiva, la cáscara es antiinflamatoria.

Es antimicrobiano (combate bacterias, virus y ácaros), astringente, depurativo, febrífugo, hipotensor, reconstituyente y tónico.

Ayuda a limpiar la sangre; fortalece los glóbulos rojos y da fuerza y vigor al organismo, resultando apropiada como tratamiento en la anemia, la clorosis, el raquitismo y la convalecencia de enfermedades agotantes.